Recopiló: Lic. Jaime Noé Villalta Umaña
Prof. y Abg.
ATLACATL, EL JOVEN, AL ZENZONTLE
Francisco Gavidia
Francisco Gavidia
Avecilla misteriosa,
Que así tienes de la hermosa
Un puesto en el corazón,
Dividiendo el señorío
Del que es dueño, que es el mío
De un león;
¿Por qué dejas su camino?
¿Anuncias el mal destino?
Es esperar
Es tormento y es arrobo:
La hizo presa el puma? Un Lobo?
Algún jaguar?
¡Por el sol!... No puede ser:
Mas es bella y es mujer!...
¿Dime si estamos, por Dios,
En su corazón sencillo,
Sólo los dos, pajarillo,
¿Solo los dos?...
Que así tienes de la hermosa
Un puesto en el corazón,
Dividiendo el señorío
Del que es dueño, que es el mío
De un león;
¿Por qué dejas su camino?
¿Anuncias el mal destino?
Es esperar
Es tormento y es arrobo:
La hizo presa el puma? Un Lobo?
Algún jaguar?
¡Por el sol!... No puede ser:
Mas es bella y es mujer!...
¿Dime si estamos, por Dios,
En su corazón sencillo,
Sólo los dos, pajarillo,
¿Solo los dos?...
LA FLOR DE IZOTE
Francisco Gavidia
La girándula hermosa
Que suspende al poeta, —
El izote, a que llaman bayoneta,
¿Qué anuncia o qué defiende
Con sus explosión de espadas?
Pues, —la yucca gloriossa
Que sabe en sus raíces el que sabe;
Las llamadas mandioca;
Y del gran Bello “blanco pan” llamadas.
Y hecha pan es cazabe;
Y lo que más bien sabe, —
En la más noble sopa, es la tapioca.
EN LA ÚLTIMA PÁGINA DE EL INFIERNO DEL DANTE
Francisco Gavidia
Francisco Gavidia
¡Oh tú que tienes los cabellos canos!
Tú, dime: en el camino de la vida,
¿Nadie llega hasta el fin de la partida
La frente pura, cándidas las manos?
Dime si por ventura son hermanos
Egoísmo y virtud, fuerza y caída?
¿Nunca entran sin terror a la escondida
Mansión de los recuerdos, los ancianos?
El juez, el acusado y el que acusa
Se miran con rubor que a todos quema:
Herencia de maldad ¿quién te rehúsa?
¡Poema del rey Pecado es tu poema!
Dante; ¿quién está en pie? Tu noble Musa
Clamando sobre todos ¡anatema!
Tú, dime: en el camino de la vida,
¿Nadie llega hasta el fin de la partida
La frente pura, cándidas las manos?
Dime si por ventura son hermanos
Egoísmo y virtud, fuerza y caída?
¿Nunca entran sin terror a la escondida
Mansión de los recuerdos, los ancianos?
El juez, el acusado y el que acusa
Se miran con rubor que a todos quema:
Herencia de maldad ¿quién te rehúsa?
¡Poema del rey Pecado es tu poema!
Dante; ¿quién está en pie? Tu noble Musa
Clamando sobre todos ¡anatema!
NEUROSIS
Francisco Gavidia
Francisco Gavidia
Sabe que es el espíritu un abismo
Y el corazón un mar:
Así es que dentro llevo de mí mismo
A la vez una y otra inmensidad.
Mis nervios, arpa viva, en el ramaje
Cuelgan del árbol de mi cuerpo y dan
Un gemido al pasar por su cordaje
La tempestad.
Y el corazón un mar:
Así es que dentro llevo de mí mismo
A la vez una y otra inmensidad.
Mis nervios, arpa viva, en el ramaje
Cuelgan del árbol de mi cuerpo y dan
Un gemido al pasar por su cordaje
La tempestad.